Igual que tú, tu cachorro debe cuidar sus dientes para no tener problemas como mal aliento. Aunque no lo creas este es un problema que los puede afectar, pero todo se soluciona con una rutina adecuada de limpieza y buena alimentación.
Cepillar adecuadamente los dientes de tu cachorro ayuda a evitar problemas de encías y otros relacionados con la falta de higiene bucal. Para cepillar sus dientitos, puedes utilizar un cepillo de niños o mejor aún, uno especialmente para ellos. Si le preguntas a tu veterinario, él te aconsejara sobre la manera correcta de cepillar esos colmillitos con cuidado.
Si para niños existe una gran variedad de cepillos y pastas dentales, para cachorros hay casi la misma variedad, por eso debes asegurarte de elegir el mejor para tu pequeño. Para ayudarte en esta importante decisión te damos tres consejitos:
- Asegúrate que las cerdas del cepillo sean suaves y no vayan a lastimar sus encías.
- El tamaño del cepillo debe ajustarse a su boquita, no tan grande ni tampoco tan pequeño.
- Y finalmente fíjate si te sientes cómodo con su mango, pues quien lo va a cepillar eres tú.
Si te gusta mucho tu pasta de diente y crees que a tu cachorro también le puede gustar, OLVIDALO, si lavas sus dientitos con tu pasta lo más seguro es que lo enfermes. Debes comprar una pasta de dientes hecha especialmente para perros, y que no contenga sal, detergentes o enzimas, pues estas dañan la salud de tu cachorro.
La primera vez que cepilles los colmillitos de tu cachorro te será difícil, en especial si no están acostumbrados a hacerlo. El mejor camino es hacer esto desde que son cachorro, si ya son adultos debes hablarles gentilmente, ser cariñoso, no forzarlo y después puedes darle un premio por su colaboración. Debes iniciar el cepillado desde la parte posterior e ir avanzando con cepilladas circulares.
Si tu cachorro te da mucha pelea para evitar que le laves los dientes, no pierdas la paciencia y tratalo de nuevo con una toallita. Habla con calma, con cariño o cántale una canción para relajarlo. Si lo haces bien y con suavidad, tu cachorro pronto se acostumbrara a la sensación de tener tus dedos en su boca y después de uno o dos meses podrás intentarlo con el cepillo de nuevo.
Lo ideal es lavar sus dientes diariamente, igualito que los tuyos, pero si no puedes hacerlo, pasando un día es aceptable. Mira la coquita de tu cachorro como si fuese la tuya, cuidala con amor y veraz que su aliento mejora y no se le caerán los dientes por la edad.